Autor: Edita Rocío Castillo Sanzana
Escuela: G-790 Carileufu
Curso: 5to. Año
Esta es una historia que se cuenta en el sector de Carileufu, y yo la escuché de una señora que conocí. Hubo un tiempo, en que el pueblo mapuche habitaba este lugar y durante muchos años sufrió una sequía muy grande y la pobreza se hizo notar, lo que casi provoca la desaparición de esta tribu.
En esta tribu había una princesa muy bondadosa. Ella un día decidió ofrecerse como sacrificio a la madre tierra para pedir que no se secaran ni murieran las siembras. La muchacha murió, pero el Lago Caburgua en vez de crecer y dar agua a la tribu, comenzó a secarse y todos sufrieron mucho.
Un día cuando todos lloraban por la penosa muerte de la princesa, que parecía ser en vano, comenzó a temblar y todos se asustaron mucho; de pronto, en medio de la aldea comenzó a brotar agua fresca y cristalina y la tribu agradeció feliz a la madre tierra por su regalo.
Desde entonces la gente admira y recorre aquel lugar de donde brota un agua fresca y cristalina, que es llamado en la actualidad “Los Ojos de Caburgua” y es prueba viva del sacrificio de una princesa mapuche.
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